Salsa cuatro quesos
Hay muchas personas que sienten una enorme debilidad por el queso. La denominada salsa de cuatro quesos es ideal para aquellos individuos que, precisamente, enloquecen con este alimento derivado de la leche. Si hablamos de salsas para pastas, ésta se constituye como un verdadero clásico. No sólo es deliciosa, sino que resulta realmente fácil de preparar. Se puede elaborar con el tipo de queso que prefieras, de manera sencilla y muy rápida. ¿El resultado? Un adobo cremoso, salado y exquisito, que se puede combinar con cualquier clase de pasta. No obstante, te la recomendamos especialmente para acompañar ravioles de pollo, ravioles de jamón y queso, crepes o ñoquis. He aquí los pasos a seguir:
Ingredientes:
• 100 ml de leche o crema de leche
• 150 gramos de queso mozarella o cuartirolo
• 150 gramos de queso gruyere o pategras
• 50 gramos de queso roquefort
• 100 gramos de queso reggianito o parmesano rallado
• Sal a gusto
Preparación:
En primer lugar, cortar todas las clases de quesos en pequeños trocitos. La idea de esto es que se derritan con mayor facilidad. A continuación, tomar una olla y disponer en ella tanto la leche como los pedazos de queso. Llevar al fuego y esperar que los quesos se disuelvan por completo.
Una vez derretida la mezcla, incorporar el queso rallado (puede ser reggianito o parmesano). Revolver bien. Si la consistencia de la salsa todavía es bastante chirla, es importante sumar un poco de harina para volverla más espesa. Por último, agregar sal a gusto.
Para un sabor más intenso, esta exquisita salsa también puede llevar una cebolla grande (la cual se debe saltear previamente en manteca hasta que quede transparente). Además, es posible condimentar la salsa cuatro quesos con nuez moscada, pimienta blanca y tomillo.